Esta reducción de 50 puntos básicos fue apoyada por cuatro de los codirectores del Emisor, mientras los otros tres estuvieron a favor de reducir las tasas en 75 puntos básicos.
Hasta noviembre de 2023 las tasas de interés del Banco de la República estaban ubicadas en 13,25%; en diciembre bajaron 25 puntos y quedaron en 13%. En enero bajaron otros 25 puntos básicos y quedaron en 12,75%. A finales de marzo la reducción fue de 50 puntos y quedaron en 12,25%, y en mayo lo hizo en un porcentaje similar y las dejó en 11,75%.
En junio, la reducción fue de 50 puntos básicos y quedaron en 11,25%, y para julio de 2024 la tasa de referencia quedó en 10,75%. Con la reducción de septiembre pasado el Emisor dejó su tasa de referencia en 10,25%, y con la reducción de hoy quedó en 9,75%.
De acuerdo con el ministro de Hacienda y Crédito Público, Ricardo Bonilla González, que tiene un asiento en la Junta Directiva del banco central, “persiste la decisión de seguir bajando las tasas, eso es unánime. Persiste la diferencia en términos de cuál es el monto a reducir. Nuevamente, por mayoría, solamente se reduce en 50 puntos la tasa de intervención, y llega a 9,75%’, dijo el funcionario quien confianza en una reducción mucho mayor.
De hecho, el jefe de la cartera de finanzas públicas ha insistido en que el Gobierno del Cambio confía en que al cierre de 2024 la tasa de referencia se reduzca a 8% para impulsar la reactivación económica. No obstante, solo resta una reunión de Junta Directiva a mediados de diciembre próximo.
Las razones del Emisor
En su discusión de política, la Junta Directiva tuvo en cuenta los siguientes elementos:
– La inflación anual en septiembre se ubicó en 5,8%, por debajo del registro de 6,1% en agosto. La inflación sin alimentos ni regulados permaneció estable alrededor de 5,5%.
– Las proyecciones de inflación del equipo técnico para 2024 se revisaron a la baja a 5,3% y las expectativas de inflación para fin de 2025 permanecen alrededor de 3%.
– El equipo técnico revisó al alza sus proyecciones de crecimiento para 2024 en 1,9%, y para 2025 en 2,9%.
– Las presiones cambiarias recientes han estado asociadas a la fortaleza del dólar a nivel global y a la caída del precio del petróleo.
– La incertidumbre en torno a la situación fiscal en Colombia obedece a factores de corto y mediano plazo como el desfase de los recaudos tributarios y los faltantes de financiamiento del presupuesto de 2025.
– El proyecto de reforma constitucional al Sistema General de Participaciones podría comprometer la sostenibilidad de las finanzas públicas.
Concluye el Emisor que “la reducción de la tasa de interés aprobada el día de hoy continúa apoyando la recuperación del crecimiento económico y mantiene la prudencia requerida, dados los riesgos que subsisten sobre el comportamiento de la inflación’.