Comunicado de la ONU sobre lo sucedido en el Catatumbo:
La Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, ONU Derechos Humanos, condena las graves infracciones del Derecho Internacional Humanitario, DIH, y abusos perpetrados por grupos armados no estatales en la región del Catatumbo, Norte de Santander, desde la semana anterior. Entre otros, la Oficina verificó con varias fuentes la ocurrencia del homicidio de al menos 60 personas; el desplazamiento forzado de más de 18 mil personas; el confinamiento de más de 1000 personas, incluyendo 23 comunidades indígenas del Pueblo Bari y comunidades del Pueblo Yukpa; la privación de la libertad de al menos 30 personas; la desescolarización de 46 mil niñas, niños y adolescentes; amenazas y estigmatización de liderazgos sociales; y homicidio de firmantes de paz, entre otras violaciones ocurridas en Tibú, Teorama, Sardinata, Convención, El Tarra, San Calixto, Hacarí y Abrego.
ONU Derechos Humanos expresa su profunda preocupación por la muy grave situación del Catatumbo, en particular para la población civil. De acuerdo con fuentes oficiales esta sería una escalada de violencia del Ejército de Liberación Nacional, ELN, con un impacto nefasto para los derechos de las comunidades, incluyendo a mujeres, niñas y niños, y a pueblos indígenas.
La Oficina verificó, entre los homicidios reportados hasta la fecha, el homicidio de dos personas defensoras de derechos humanos, los líderes Carmelo Guerrero y Pedro María Ropero, así como múltiples amenazas en contra de liderazgos sociales de la región, quienes en muchos casos se desplazaron junto con sus familias a Ocaña y Cúcuta.
Ante la gravedad de la situación, ONU Derechos Humanos insta al ELN y a los otros grupos armados no estales a respetar los derechos humanos de la población civil y le reitera su obligación de cumplir las normas del DIH, en particular el Artículo 3 común y el Protocolo II, aplicables a los conflictos armados no internacionales.
Dentro del monitoreo de la situación, ONU Derechos Humanos recibió información sobre el manejo de protección de civiles y la asistencia humanitaria, por parte del Gobierno Nacional y local. La Oficina saluda estas acciones del Estado. Sin embargo, lo insta a incrementarlas para atender las necesidades humanitarias de la población desplazada y confinada.
En el marco de la implementación de la Política de Seguridad, Defensa y Convivencia Ciudadana – Garantías para la vida y la paz 2022-2026, la Oficina de ONU Derechos Humanos también insta al Estado a articular acciones de prevención y protección de las comunidades que se encuentran en riesgo de ser afectadas por el accionar de los grupos armados no estatales. En particular, llama a avanzar en la aplicación de las acciones de inteligencia, previstas en esa política, para desarticular las organizaciones armadas ilegales.
ONU Derechos Humanos subraya también la necesidad de que el Estado garantice que las y los líderes sociales y personas defensoras de derechos humanos puedan seguir ejerciendo su vital labor en el territorio.
Además, ONU Derechos Humanos llama a las autoridades a adoptar medidas eficaces y estructurales de protección que rompan los confinamientos actuales que enfrentan las comunidades en el Catatumbo, pero sobre todo que les permitan vivir en paz, sin la presencia de grupos armados no estatales, que llevan varias décadas vulnerando los derechos de la población.
En ese sentido, ONU Derechos Humanos exhorta a iniciar a la brevedad la implementación de la Política Pública de Desmantelamiento de organizaciones criminales como una manera de iniciar los cambios estructurales y de transformación territorial necesarios para mitigar el flagelo de la violencia.
Desde la semana pasada, ONU Derechos Humanos ha coordinado y apoyado a autoridades locales y a la comunidad internacional para fortalecer la respuesta institucional y continuará dando seguimiento a la situación de derechos humanos en el Catatumbo. ONU Derechos Humanos mantendrá su asistencia técnica al Estado, a las organizaciones de la sociedad civil, a las personas defensoras y a liderazgos sociales.
Finalmente, la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos expresa su solidaridad y condolencias para las víctimas en el Catatumbo y sigue comprometida a incidir para su efectiva protección y el respeto de sus derechos.