Hoy, con profunda tristeza, nos despedimos de Jorge Soto Daza, un pilar del periodismo en La Guajira. Su vida fue un testimonio de dedicación y pasión por la verdad, dejando una huella imborrable en cada rincón de nuestra comunidad.
Durante su carrera, Jorge se destacó no solo por su habilidad para contar historias, sino también por su firme compromiso con la ética informativa. Con cada reportaje, buscó no solo informar, sino también inspirar y educar a quienes le leían. Su voz resonaba con la autenticidad de quien amaba lo que hacía y lo hacía con responsabilidad.
Aunque hoy su presencia física ya no esté entre nosotros, su legado perdurará en las enseñanzas que dejó y en la admiración que cultivó tanto en colegas como en lectores. Recordaremos siempre su calidez humana, su búsqueda incansable por la verdad y su inquebrantable fe en el poder de la palabra.
Despedimos a Jorge con gratitud, sabiendo que su luz seguirá brillando en el corazón de todos aquellos que tuvieron el privilegio de conocerlo y aprender de él. Que su memoria y su ejemplo nos acompañarán siempre.